El nuevo estilo de vida que estamos forzados a seguir implica que no es seguro estar en sitios donde se conglomere la gente, esto implica la abstinencia a ir a parques y áreas de juego en donde los niños pueden divertirse en exteriores, y por supuesto en grupos.

Estar en exteriores y estimular la imaginación es de suma importancia para la educación y desarrollo de los niños, y contar con una zona segura en donde puedan jugar y fomentar este tipo de actividades lúdicas no puede quedar en segundo plano.

Un área de juegos en casa puede ser de bajo costo, y mucho más económico de lo que pensamos que cuesta, y su utilidad puede ser un parte aguas en la formación de las habilidades que los niños requieren.

¿Porque es importante?

Actualmente los padres, en su mayoría, acostumbran a permitir que los niños se distraigan con juegos digitales o para el teléfono celular, sin embargo, no es recomendable que a edades tempranas se abuse de estas herramientas, pues reciben demasiados estímulos audio visuales y esto puede ser perjudicial a largo plazo.

Es importante que los niños fomenten el uso de su imaginación y realicen actividades que estimulen el intelecto y otras habilidades que les servirán en el futuro, y antes de los 14 años todas estas funciones pueden ser cubiertas por un área de juegos en casa.

¿Como armar un área de juegos?

Existen grandes juegos clásicos en los parques, columpios, balancines, pasamanos, pero igualmente podemos encontrar otros más elaborados que permiten a los niños hacer recorridos, subir, bajar y disfrutar de resbaladillas.

Como hemos dicho con anterioridad ninguna de estas opciones es costosa si se sabe cómo hacerla, incluso para las superficies existen diversas opciones y variaciones en el costo, como superficies de fomi, pasto sintético o incluso pasto real, que es el que estéticamente se ve superior.

Esta opción de tener un área de juegos en casa es un elemento importante en el desarrollo infantil, que a largo plazo seguirá funcionando con las siguientes generaciones, no requieren de mucho mantenimiento y muchas veces pueden costar menos que los juegos electrónicos.